Los quistes en los ovarios son bolsas que contienen líquido en su interior, como las ampollas, y que se desarrollan comúnmente en las mujeres durante su edad fértil. Se forman en los ovarios, unos órganos de tamaño similar al de una almendra que se encuentran a ambos lados del útero. Conviene tener en cuenta que la mayor parte de los quistes en los ovarios son inocuos y no es necesario ningún tipo de tratamiento para hacerlos desaparecer.
El funcionamiento normal de los ovarios consiste en producir un óvulo al mes. Durante el proceso de ovulación, dentro del ovario se forma un folículo: una estructura similar a un quiste. Cuando el óvulo es liberado durante la ovulación, se produce una ruptura en el folículo maduro. A partir del folículo vacío se desarrolla un corpus luteum que, en caso de no haber fecundación, se disuelve.
Son numerosas las razones por las que aparecen quistes en los ovarios. El tipo más común es el quiste folicular, que resulta del crecimiento del folículo. El folículo es la bolsa rellena de fluido que contiene un óvulo. Los quistes en los ovarios de tipo folicular se desarrollan cuando el folículo alcanza un tamaño superior al normal durante el ciclo menstrual y no se abre para liberar el óvulo. Normalmente, los quistes foliculares se deshacen espontáneamente en cuestión de días o meses. Los quistes pueden contener sangre —quistes hemorrágicos— debido a una lesión o a un escape de los vasos sanguíneos a la bolsa del óvulo.
Otro tipo de quistes en los ovarios que está relacionado con el ciclo menstrual es el quiste lúteo. El corpus luteum es una parte del tejido del interior del ovario que aparece tras la liberación del óvulo del folículo. Si el embarazo no tiene lugar, el corpus luteum normalmente se rompe y desaparece. No obstante, se puede llenar de fluidos o de sangre y permanecer como un quiste, produciendo un dolor de ovario. Por lo general, estos quistes en los ovarios se encuentra solamente en un lado y no produce síntomas.
Los quistes funcionales son quistes normales que a menudo se contraen y desaparecen en un periodo de dos a tres ciclos menstruales. Debido a que este tipo de quistes en los ovarios se forma durante la ovulación, raramente afecta a las mujeres menopáusicas, ya que han dejado de producir óvulos.
Ocasionalmente, los tejidos ováricos se desarrollan de forma anómala y producen otro tipo de tejidos corporales como, por ejemplo, pelo o dientes. Los quistes en los ovarios que contienen estos tejidos anómalos se denominan teratomas quísticos o quistes dermoides.
La endometriosis es una afección en que las células que normalmente crecen dentro de la matriz comienzan a crecer en el exterior del útero, siendo el ovario un lugar común para la endometriosis. Cuando la endometriosis se produce en el ovario, la zona de tejido endometrial puede crecer y sangrar con el tiempo, formando quistes en los ovarios de color pardo que en ocasiones se conocen por el nombre de quistes de chocolate o endometriomas.
Los tumores benignos y malignos también pueden contener quistes de ovario. Además, la afección conocida como síndrome ovárico poliquístico (SOPQ) se caracteriza por la presencia de múltiples quistes en ambos ovarios. El SOPQ está relacionado con una serie de problemas hormonales y es la causa más común de la infertilidad en las mujeres.
Las infecciones de los órganos pélvicos pueden incluir los ovarios y las trompas de Falopio. En casos graves, se pueden producir espacios quísticos rodeados de pus en las zonas cercanas a los ovarios o las trompas.
Concluye así este repaso a las causas más comunes de los quistes en los ovarios, una de las principales razones del dolor de ovario.